Ingredientes :
4 Perdices
2 vasos de Aceite de Oliva
1 vasito de Vinagre de Vino
1 Cebolla
1 cabeza de Ajos
1 Zanahoria
2 Hojas de Laurel
Pimienta Negra
Romero
Tomillo
Sal
Agua
Preparación :
Limpiamos bien las perdices, por dentro y por fuera. Si se compran ya limpias, se repasan bien.
Ponemos una cazuela al fuego, cubriendo el fondo de la misma con aceite. Freimos las perdices por todos lados, a fuego lento, de manera que queden bien selladas y doradas. Las sacamos de la cazuela y reservamos.
Cortamos la cebolla y la zanahoria en trozos y los ponemos en la cazuela junto con los dientes de ajo enteros, con piel, el laurel, el tomillo, romero y unos cuantos granos de pimienta. Añadimos el resto del aceite, el vinagre y la sal. El tipo de vinagre y la cantidad va al gusto de cada uno. A mi me gusta el vinagre fuerte. Cubrimos de agua, sin necesidad de que sobrepase a las perdices.
Tapamos la cazuela, pero la dejamos entreabierta y cocemos suavemente durante 1 hora y media. Dejamos enfriar en la misma cazuela, con todos los ingredientes de la cocción.
Este plato es mejor prepararlo de víspera y que se asiente por lo menos durante un día. Para ello, una vez que se enfríe, sacamos las perdices, las ponemos en un recipiente que no sea metálico y las cubrimos con el líquido de la cocción colado. Las guardamos en la nevera hasta su uso. Yo siempre las uso al día siguiente, pero aguantan varios días.
Si quisieramos conservar las perdices más tiempo, necesitaríamos obtener suficiente líquido como para cubrirlas totalmente, guardarlas en un recipiente con tapa, cubrirlas y completar por encima con aceite de manera que se forme una capa completa en la superficie. El escabeche siempre ha sido un método de conservación eficaz.
4 Perdices
2 vasos de Aceite de Oliva
1 vasito de Vinagre de Vino
1 Cebolla
1 cabeza de Ajos
1 Zanahoria
2 Hojas de Laurel
Pimienta Negra
Romero
Tomillo
Sal
Agua
Preparación :
Limpiamos bien las perdices, por dentro y por fuera. Si se compran ya limpias, se repasan bien.
Ponemos una cazuela al fuego, cubriendo el fondo de la misma con aceite. Freimos las perdices por todos lados, a fuego lento, de manera que queden bien selladas y doradas. Las sacamos de la cazuela y reservamos.
Cortamos la cebolla y la zanahoria en trozos y los ponemos en la cazuela junto con los dientes de ajo enteros, con piel, el laurel, el tomillo, romero y unos cuantos granos de pimienta. Añadimos el resto del aceite, el vinagre y la sal. El tipo de vinagre y la cantidad va al gusto de cada uno. A mi me gusta el vinagre fuerte. Cubrimos de agua, sin necesidad de que sobrepase a las perdices.
Tapamos la cazuela, pero la dejamos entreabierta y cocemos suavemente durante 1 hora y media. Dejamos enfriar en la misma cazuela, con todos los ingredientes de la cocción.
Este plato es mejor prepararlo de víspera y que se asiente por lo menos durante un día. Para ello, una vez que se enfríe, sacamos las perdices, las ponemos en un recipiente que no sea metálico y las cubrimos con el líquido de la cocción colado. Las guardamos en la nevera hasta su uso. Yo siempre las uso al día siguiente, pero aguantan varios días.
Si quisieramos conservar las perdices más tiempo, necesitaríamos obtener suficiente líquido como para cubrirlas totalmente, guardarlas en un recipiente con tapa, cubrirlas y completar por encima con aceite de manera que se forme una capa completa en la superficie. El escabeche siempre ha sido un método de conservación eficaz.
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La receta esta vez es una mezcla de la que publicó Su en su blog "Webos Fritos" este año y la receta tradicional del libro "La cocina Completa". Es una preparación muy sencilla y de gran resultado.
A mi personalmente, los escabeches me encantan y una buena perdiz preparada de esta manera es deliciosa. Yo no tengo la posibilidad de encontrar perdices "de verdad". Con esto quiero decir, que por aquí no venden perdices recién traidas por los cazadores, perdices de campo..... En Bilbao teníamos unos amigos cazadores que siempre nos surtían de perdices. Deliciosas. Aquí tengo amigos que suelen ir a cazar a la zona de Jaén, pero todavía no he conseguido que me traigan ninguna........(a buen entendedor....).
Yo compro las perdices congeladas, que aunque no es lo mismo, salen buenas. Antes las compraba en Makro, pero no me gustaban demasiado. Ahora me las trae mi carnicero y son unas perdices más enteras, más grandes y con garantía de ser nacionales.....
A mi personalmente, los escabeches me encantan y una buena perdiz preparada de esta manera es deliciosa. Yo no tengo la posibilidad de encontrar perdices "de verdad". Con esto quiero decir, que por aquí no venden perdices recién traidas por los cazadores, perdices de campo..... En Bilbao teníamos unos amigos cazadores que siempre nos surtían de perdices. Deliciosas. Aquí tengo amigos que suelen ir a cazar a la zona de Jaén, pero todavía no he conseguido que me traigan ninguna........(a buen entendedor....).
Yo compro las perdices congeladas, que aunque no es lo mismo, salen buenas. Antes las compraba en Makro, pero no me gustaban demasiado. Ahora me las trae mi carnicero y son unas perdices más enteras, más grandes y con garantía de ser nacionales.....
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